sábado, 5 de diciembre de 2015

Inmigrantes analógicos

Mucho se habla en los últimos tiempos de los nativos digitales y los inmigrantes que llegaron tarde a la fiesta. 
Por suerte o desgracia no es tan sencillo como que los que nacieron en los 80 tienen integradas las tecnologías en sus vidas y para los anteriores es un mal necesario.
Yo mismamente soy del 76, tuve mi primer ordenador con 10 años y soy más nativa que la primera. Internet para mí no es una herramienta que uso como un fin, es parte de mi vida; vivo en dos mundos a la vez en constante interrelación ,algo muy difícil de explicar a los no iniciados.
No tengo ningún tipo de problema para desenvolverme en el mundo digital, conozco las reglas sociales que me permiten interactuar con otros internautas por placer o intercambiar información. Pocas veces me he sentido falta de recursos en este medio.
Sin embargo cada vez más echo en falta los recursos 2.0 en el mundo analógico.
Mil veces necesitaría un emoticono para dar entonación a una determinada frase y cuantas veces no me habré lamentado de no poder poner #hashtags después de un texto por no hablar de la sencillez de dar un mensaje corto y concreto y que todos lo entiendan sin ambigüedades.
Definitivamente me considero inmigrante analógico,